Qué ver en Oporto en dos días

Qué ver en Oporto en dos días

Debido a que la mayoría de los viajes a Oporto son escapadas de un fin de semana, os proponemos un itinerario para conocer Oporto en dos días.

El siguiente itinerario está pensado para una escapada de fin de semana, llegando el viernes por la tarde y regresando el domingo por la tarde. Es válido para otros días de la semana, pero tendríais que comprobar los horarios de apertura de cada museo y punto de interés (muchos cierran los lunes).

Si sois de los que prefieren las visitas guiadas cuando visitan un nuevo destino, esta es una de las opciones más completas que podéis reservar en Oporto:

Día de llegada

Probablemente no tengáis mucho tiempo para ver monumentos el día que lleguéis a Oporto, pero podéis aprovechar para pasear por la ciudad y ver algunas zonas interesantes.

Si queréis llegar hasta el hotel en el menor tiempo posible y evitando complicaciones, os recomendamos reservar el traslado desde el aeropuerto de Oporto hasta el hotel.

Un buen punto de partida para conocer Oporto puede ser la Avenida de los Aliados. Situada en pleno centro de Oporto, esta calle está repleta de edificios modernistas entre los que se incluye el Ayuntamiento encumbrando la avenida con su gran construcción en mármol y granito.

Caminando por la avenida y dejando atrás el Ayuntamiento llegaréis hasta la Plaza de la Libertad, la plaza más importante de Oporto. En su centro veréis una estatua ecuestre del Rey Pedro IV.

Girando a mano izquierda llegaréis hasta la estación de trenes San Bento, uno de los grandes tesoros de la ciudad. Su hall decorado con más de 20.000 azulejos en los que se relata la historia de Portugal os dejará impresionados.

Cuando salgáis de la estación bajad por la rúa de Mousinho da Silveira y después seguid recto por la rúa da Alfándega hasta llegar a la orilla del Duero.

En la zona de Ribeira encontraréis decenas de restaurantes con terraza en los que degustar platos típicos portugueses mientras observáis el Duero, las bodegas y el Puente de Luis I.

Si no queréis conformaros con disfrutar de las vistas del Duero, os recomendamos reservar el crucero de los seis puentes, un paseo en barco que os permitirá disfrutar de la ciudad desde un encantador punto de vista.

Si preferís daros un capricho con una opción más completa, podéis reservar el crucero de los seis puentes con cena, o bien el crucero con cena y música en directo.

Como ya se habrá hecho tarde aquí termina el itinerario de hoy.

Primer día

La visita comienza a las 10 de la mañana en la Iglesia de los Clérigos; para comenzar bien el día, después de visitar la iglesia tendréis que subir a la Torre de los Clérigos. Las vistas privilegiadas de la ciudad hacen olvidar los más de 200 escalones de subida.

Una vez de vuelta en tierra firme girad a la derecha en la rúa San Filipe de Nery y al final de ésta a la izquierda por la rúa das Carmelitas. A la altura del número 144 está la Librería Lello e Irmao, una librería de ensueño que se cree que ha servido de escenario para rodar algunas escenas en películas como Harry Potter.

Continuando por la rúa das Carmelitas llegaréis hasta la rúa do Carmo, donde podéis tomar el tranvía 22 que para enfrente de la Iglesia de Nuestra Señora do Carmo.

La última parada del tranvía es la Plaza de Batalha, vuestro siguiente destino. Allí se encuentra la Iglesia de San Ildefonso con su peculiar fachada decorada con cientos de azulejos azules y blancos.

Dejando la rúa 31 de Janeiro a mano izquierda llegaréis a la Rua Santa Catarina, una de las principales arterias comerciales de la ciudad. Avanzando por ella encontraréis a mano derecha el Café Majestic, un elegante café de los años 20 donde tomar algo y disfrutar de su ambiente histórico.

Volviendo a Santa Catarina y avanzando un poquito más podréis ver la fachada de la Capilla de las Almas, una pequeña iglesia decorada con azulejos blancos y azules que a estas alturas ya os resultarán familiares.

Bajando por la rúa de Fernándes Tomás veréis el Mercado do Bolhao, un lugar nostálgico donde montones de vendedores exponen sus frutas y verduras como si por ellos nunca hubiera pasado el tiempo.

Cuando salgáis del mercado tomad la rúa Formosa hasta la Avenida de los Aliados. Recorred la avenida, la Plaza de la Libertad y la rúa de Mousinho da Silveira hasta llegar a la rúa da Bolsa. En el edificio del Palacio de la Bolsa es imprescindible hacer una visita guiada para conocer su historia.

Doblando la esquina por la rúa da Bolsa está la Iglesia de San Francisco donde podéis ver su recargado interior y sus catacumbas.

Si aún tenéis tiempo y ganas, podéis aprovechar para visitar la Catedral. La mejor forma de subir hasta ella es coger el funicular al final de Cais da Ribeira.

Si ya os habéis cansado con solo leer el itinerario y lo vuestro es recorrer las ciudades utilizando el autobús turístico para no tener que caminar demasiado, podéis comprar los billetes a través de la web en este enlace:

El alma de Oporto está unida al fado, por lo que uno de los planes imprescindibles que se pueden hacer en la ciudad es disfrutar de un espectáculo de Fado. En los siguientes enlaces podéis reservar algunas de nuestras opciones preferidas:

A esta hora ya estaréis pensando dónde cenar. Si os gustó la zona de la Ribeira no es mala idea repetir, ya que es uno de los lugares más animados de la ciudad. Si estáis interesados en probar algo nuevo podéis dirigiros a la zona del Carmo, donde tomasteis el tranvía 22 por la mañana.

Segundo día

Si el día anterior no tuvisteis tiempo suficiente para ver la Catedral, es un buen punto donde comenzar la visita. Podéis ir temprano ya que abre sus puertas a las 9 de la mañana. Después de visitar la catedral y el claustro y haber tomado algunas fotos de la ciudad desde las alturas, el Funicular dos Guindais os llevará hasta la parte baja de la ciudad.

Cruzando el Puente de Luis I llegaréis hasta Vila Nova de Gaia, localidad vecina de Oporto donde están situadas las bodegas de vino de Oporto.

En la Avenida de Diogo Leite, paralela al río encontraréis puestecillos donde venden las excursiones en barco por el Duero (normalmente suelen regalar la entrada a algunas bodegas).

Después del paseo en barco es el momento idóneo para visitar algunas bodegas y degustar sus dulces vinos. Las bodegas más recomendables para nosotros son Ferreira, Sandeman y, por su museo, Ramos Pinto.

En la calle de las bodegas podéis coger un autobús para llegar al centro de la ciudad y desde allí coger el metro al aeropuerto.

¿Tienes más tiempo?

Si vais a estar más de dos días en Oporto y ya habéis hecho nuestro itinerario básico, no os preocupéis, todavía quedan muchas cosas interesantes por ver; el Museo Soares dos Reis, el Museo del Tranvía, la Iglesia San Lorenzo dos Grilos y un sinfín de lugares que no dejarán lugar al aburrimiento.

Estas son algunas de las mejores excursiones desde Oporto: